Todos hemos escuchado alguna vez que otra leyendas urbanas que te ponen los pelos de punta, sobre todo cuando lo referente trata sobre posibles entidades que sobrepasan la capacidad propia de nuestras entendederas ...
¿Quién no ha oido hablar de la existencia de señoritas de bellas curvas que atraen sutílmente la atención del más pintao por sus despampanantes dotes de belleza, y más tarde se demuestra que todo consistía en un exquisito envoltorio que sirve de morada al mismísimo diablo? ... Cuando descubres el marrón ... ¡ya las cagao!
No digo que siempre ocurra, pero sí aconsejo que si se os cruza en el camino una de estas tias impresionantes, tengais las orejas tiesas, no bajeis la guardia por si la susodicha estuviere poseida o fuere transportadora de algún poderoso inquilino extramundano ... "El demonio suele habitar elegantes moradas y desplazarse en exuberantes carrozas".
Quien os habla, con toda seguridad, no es un tipo muy propenso a ensimismarse en estas estimulaciones trampa, porque yo me pregunto "¿qué entidad espiritual, con dos dedos de frente, va a querer venir, quedarse o volver a este mundo de recortes y de locos?". Pero no le quepa la menor duda de la existencia de este tipo de fenomenologia, tengo prueba de ello, después de mi experiencia reciente ...
Ayer quedó patente que seres extraños cohabitan simultáneamente nuestro mundo. No sé si son del más allá, del más acá, del más abajo o del más arriba ... de lo único que estoy seguro es que no son de este mundo.
Todavía se me suelta la barriga cuando rememoro la escenita de pánico vivida ayer ... Desbordado por los cuatro costados ... Todo ocurrió en un plis plas, en un periquete ... Todavía no sé cómo, pero en segundos pasé de los apacibles humedales del paraiso al más infernal infierno jamás conocido, sin pizca de tiempo para reaccionar medianamente de forma coherente ...
Os cuento ... curro en un hospital, por lo que estoy acostumbrado a contemplar finales, es decir, no soy persona frágil ni que se ponga nerviosa cuando hay que estar entre dos aguas o en tierra de nadie para ayudar al trámite de papeles con San Pedro. Tampoco en este hospital, por lo menos que yo conozca, se conocen leyendas paranormales de estas que acojonan bastante, pero siempre hay una primera vez, y me tuvo que tocar a mí ... ¡maldita sea!
Ayer tenía de compañera a Isabel, una magnífica profesional de enfermería, y no menos excelente compañera, pero después de mucho tiempo compartiendo horas de trabajo con ella en la más absoluta cordialidad, descubrí que en ese despampanante cuerpazo no vive sólo ella, creo yo que lo comparte con alguién más, y que ese alguien a mí no me suena que sea de este mundo. Temo que mi compi puede ser víctima de algún fenómeno satánico, de brujería ó de algún ocultismo chungo, y que ayer se manifestó "el cabrón" y nos puso en "jaque mate" a todos los presentes. ¡¡ojúuuu ... qué susto!!.
Yo conozco bien a mi compi, su sonrisa, sus alegrías, sus enfados y hasta sus malos humores, no la confundiría ni en la más absoluta ceguera. Yo sé muy bien quién es esta mujer de bello aspecto almohade que tengo por compañera. Yo sé muy bien hasta donde llegan los límites extravagantes y creativos de sus dotes artísticas, más acorde con el talento propio de una inquietante fotógrafa deseosa de descubrir y plasmar esa misteriosa realidad oculta y negada a la ignorancia del vulgo. Tampoco, y lo digo con conocimiento de causa, lo de ayer se puede achacar a algún brote puntual psicótico del que por desgracia nadie puede estar a salvo. Tampoco fue una reacción de acúmulo de estrógenos ... No le den más vueltas, lo de ayer es lo que me imagino, y si no al tiempo ...
Cuando agonizaba la longeva jornada, cuando hasta el sol había venido a morir al Tomi ... y se podía apreciar desfallecer lentamente a través de las cristaleras del fondo del pasillo. Cuando se estaban ultimando detalles y ya te pesa hasta el alma, ocurrió el fenómeno que nos dejó absorto a todos ...
Isabel venía lamentándose de un dolor entre ceja y ceja, que unas veces achacaba a que necesitaba gafas y otras a que padecía de jaqueca, se quejaba de cansancio y de la complejidad de unas nuevas gráficas que le provocaban aumentar el nivel de atención en un momento donde las fuerzas estaban muy justitas ... es decir, mi compi ya no podia con el culo, se le estaba haciendo la jornada más larga que la infancia de Heidi ... ¿De dónde sacó la energía para ...? ¡¡eeeh!! ¿de dónde ...?
Un simple bolígrafo desechable y de bajo costo que, como es habitual, también le llega su hora y deja de escribir, fue el detonante que despertó el diablo que mora en el cuerpo de mi compañera Isabel ...
Erguió bruscamente el cuerpo y alzó el cuello levantando esa misteriosa melena negra que le da empaque. Giró violentamente la cabeza hacia nosotros, dejando palpante una mirada diabólica, malvada y maligna que barruntaba tragedia ... "¡¡a la mieeerda el puto bolígrafo de los cojones!!", y lo lanzó contra el suelo, con una virulencia impropia de un mortal, parecía más bien de fuerzas sobrenaturales ...
Nosotros estupefactos, manteníamos un solemne silencio aterrador ... De pronto, el rostro de Isabel se transformó, a la velocidad de la luz, en una socarrona y larga sonrisa que todavía daba más miedo que la fase anterior ... ¡¡jaajaaajaaajaaa!! ¡¡jaajaajaajaa!! ... Mientras tanto, los presente permaneciamos con las caras de color blanco mate, acartonadas, endurecidas por el miedo ... ¡¡que susto!! ... Cuando de nuevo empezó a llegarme sangre a mi cerebro pensé ... ¡¡ésto no puede estar pasando!! ¡¡santo cielo!!
Todavia con restos de risa irónica en sus labios, Isbel comenzó a teclear el ordenador, pero ... la página no se carga, la pantalla muestra error ... En ese momento todos pensamos lo mismo ... "el ordenador correría el mismo trágico camino que el bolígrafo, las desgracias no vienen solas ... "in nomine patri" ... Pero un rayo de luz divina iluminó la cibernética y el trasto informático empezó a funcionar con normalidad, por esta vez habia salvado el pellejo, y todos nosotros respiramos aliviados ...
Me fui a casa con el rabo entre las piernas y preguntándome qué le habria podido ocurrir a Isabel, de dónde sacó tanta energia, cómo puede caber tantos huevos en ese cuerpo ... nos ha acojonado a todos ...
Esa noche no pude dormir bien, seguro que no pasé de la fase de ondas lentas ... Me despertaba a menudo con principio de terror, pero seguia tumbado sobre la cama con el corazón latiéndome de prisa intentando descubrir qué le había podido ocurrir a Isabel ... Posiblemente se le agudizó ese puntito de endemoniamiento propio e inherente a las mujeres ... Ahora comprendo que Adán se comiera la manzana a las trágalas, yo hubiera hecho lo mismo ... Adán se comió la manzana prohibida para salvarse de algo peor que el diablo, el cabreo de Eva ...
