A lo mejor esta temporada venidera hubiera sido una buena oportunidad para devolver al socio favores de antaño, como aquella conducta ejemplar que el sevillismo ejerció aquellos años finales de los noventas e incluso la temporada 2000/2001 con el equipo en segunda y asistiendo más de 30.000 personas al estadio para ver, con todos mis respetos, a un Toledo, a un Leganés ... hoy en día, muchos de aquellos fieles sevillistas, muy castigados por la crisis, con no haberles subido el abono se hubieran sentido satisfechos. Porque nuestro club ... nuestro Sevilla FC ... es su afición ... y un sevillista culquiera vale más que mil talonarios ... esos desconocidos son el verdadero núcleo de la entidad ...
Probablemente, también esté pasando factura los efectos de la campaña anterior ... una temporada que aunque se cumplieron los objetivos marcados, el desgaste del sevillismo fue costoso, había aficionados a los que se le hizo la temporada muy larga y cansina. También eran muchos los que iban al Pizjuán cada tarde-noche cualquiera y decían para sus adentros ... "otro partidito igual" que Getafe, Valladolid, Málaga, Xerez, Santander ...
Hace falta que la logística sevillista se ponga en marcha con proyectos prometedores e ilusionantes para el sevillismo, que transmitan visos de realidad, que potencien más si cabe, el magnífico e ingenioso mensaje de la campaña de captación de abonados, para que por lo menos, los indecisos deshagan su incertidumbre y que los menos pudientes puedan sacar sus abonos, aunque sea por orden de birbirloque, pero que no falte nadie ... que nuestro club nos necesita.
