Cala no es un jugador que irrumpa de pronto en el primer equipo como un jugador caído del mismo cielo, y que cubre con suficiencia el problema que el Sevilla FC tenía en defensa, los que le conocemos desde alevín, sabemos que si no llega a ser por una grave lesión de rodilla que le tuvo apartado del futbol casi una temporada completa, hoy en día, casi con total seguridad, sería uno de los líderes de nuestra defensa, porque Juan Cala es un futbolista que no le falta empaque para ello, desde muy pequeño ya apuntaba grandes maneras.
La dirección deportiva del Sevilla FC lo sabe, y siempre ha estado convencida de que Juan Cala es una alternativa de mucho futuro a corto y medio plazo para solucionar los graves problemas defensivos que viene sufriendo el equipo de Nervión últimamente.
Cala es un futbolista muy joven, pero que los tiene bien puestos, no se arruga ni ante las adversidades ni ante la responsabilidad. Está claro que aún le queda mucho camino por recorrer, pero facultades y carácter no le faltan, puede jugar con suficiencia en cualquier puesto de la defensa, aunque su puesto natural es de central diestro, como ustedes observarán posiciones de las que no salen futbolistas consagrados desde hace mucho tiempo.
Cala ha jugado en todas las categorías del Sevilla FC y en muchas de ellas ha ido por delante a su edad. Ha sido campeón de la Copa del Rey Juvenil; internacional sub 19 y sub 21 con la selección española.
Juan Cala es un defensa diestro muy completo y de gran polivalencia en todas las zonas de la defensa y en cualquiera de ellas puede cumplir dignamente, aunque su posición natural es de central diestro. Es un defensa contundente, fuerte, que va muy bien por alto y se suele proliferar en ataque con frecuencia, hace goles con asiduidad, sobre todo a balón parado. Suele ser un jugador de fácil concentración que dificilmente pierde la compostura en un terreno de juego; además, es un jugador rápido que va muy bien al corte y también es muy eficaz en el marcaje, por lo que se convierte en un defensa incómodo para los adversarios, difícil de desbordar en el uno contra uno, sobre todo por velocidad, y por si ello fuera poco, tiene un buen trato de balón, siempre que puede saca la pelota jugada evitando el pelotazo.
De lateral, además de cerrar muy bien su posición, no duda cuando es oportuno subir la banda incorporándose al ataque, siempre con gran criterio, intentando no descuidar su zona defensiva. Posee otra gran virtud, un muy buen tiro a puerta a media distancia.
Es el primer defensa que es capaz de marcar tres goles consecutivos en tres partidos, pero para los que seguimos la cantera, ello no es ningún fortunio casual, porque sabemos que este zaguero lebrijano lleva inherente en su status como jugador la mayor virtud del fútbol, el gol; ya desde pequeño se sabe de su gran virtud artillera, sobre todo a balón parado. En fín, otra futura perla sevillista que además, por si fuera poco, siente en blanquirrrojo como otro más de los nuestros.
Creo que tenemos que poner las miras bien lejos cuando hablamos de la cantera sevillista, seguro que si le damos el lugar que por méritos exige y merece, ésta seguirá contribuyendo de forma decisiva, como ya lo hizo en la temporada pasada, en la grandeza de nuestro club; por lo menos estarán garantizados los huevos del sevillismo en un terreno de juego en defensa de nuestro escudo, y no tenemos que soportar ni la presión, ni la desidia que a veces genera el jugador foráneo, que cuando van las cosas medio bien no dejan de atosigar a la chequera sevillista, pero que cuando les van mal no se marchan ni con agua caliente.
