lunes, 14 de noviembre de 2011

Se puede vivir el sevillismo sin molestar a nadie

Ayer estuve en la Ciudad Deportiva presenciando el encuentro de rivalidad regional frente al Cádiz con un amigo muy especial, natural de Cádiz y cadista. Pero además, este chico, aunque no se lo crean, es socio del Sevilla FC ... aunque no cabe duda que es cadista de sentimiento, y sevillista siempre que no estén sus colores amarillo de por medio ... y pude presenciar insitu la angustia que supone el que tu equipo pierda el encuentro en la última jugada del partido, y de gol olímpico ...

Cuando marcó el Sevilla Atlético, yo jaleé el gol con la máxima expresión como sevillista, pero a renglón seguido atendí la pesadumbre y el derrotismo de mi chico, y me puse, como se suele decir por aquí, en su pellejo ... y le consolé en la medida que la situación permitía algún atisbo de alivio ...

Yo siempre he enaltecido a la afición sevillista, nuestra afición, porque es el mejor bastión que sustenta estos colores, y desde este blog se ha dicho que: "La afición sevillista es actualmente una de las más originales en su forma de animar y embellecer un recinto deportivo ... Sus cánticos y plasticidad estética han conseguido añadir al fútbol una estampa de permanente sorpresa innovadora y vanguardista que solo está al alcance de las mejores aficiones del mundo".

Pero lo mismo que digo una cosa, también digo la otra, ayer estuvieron de más algunos cánticos mal sonantes que se escucharon esporádicamente por un sector radical del sevillismo ... como Puta Cadiz!! Si queremos ser grandes, el día a día nos pone a prueba, y ayer perdimos una oportunidad de ser más grandes aún ... No me valen las habituales excusas, siempre hay que ser galante, educado y respetuoso con el rival, y más aún cuando el rival que contribuye al evento deportivo es andaluz.

Tenemos que acabar erradicando estas formas conductuales entre aficiones hermanas que solo consiguen fomentar la mala imagen del andalucismo.